Si algo hemos aprendido de la mano de la TDT en España, es que cantidad no es sinónimo de calidad. Por muchos canales disponibles que encontremos en la red TDT, la calidad de los programas suele dejar bastante que desear.

Es ahí donde entran en juego otros métodos de recepción de televisión, como los decodificadores. También es cierto que en ese universo encontramos una exorbitada cantidad de opciones. Por ello hoy hemos decidido analizar el decodificador Movistar.
Decodificador Movistar TV 4K
Introduzcámonos en el territorio de la televisión Movistar. Esta plataforma ofrece un nuevo decodificador de tipo UHD 4K desde finales de 2018. Para disfrutar del mismo, el usuario debe tener contratada una de las modalidades de Fusión, aunque cualquier de los clientes actuales puede solicitar el cambio por una tarifa que ronda los 20 euros.
La operadora cuenta con dos modelos de decodificador, uno mediante cable y otro que funciona con conexión WiFi. A través de ambos, los usuarios podremos ver algunos canales y contenidos bajo demanda con esta resolución (4K), además de las plataformas como Netflix, que se encuentran albergadas en Movistar.
Es importante conocer que, si bien Movistar sigue adelante con sus planes para ofrecer el máximo número de contenidos 4K en su oferta, por el momento la situación se ha ralentizado bastante.
Los usuarios actuales pueden disfrutar de los canales Movistar Partidazo UHD, beIN LaLiga 4K o Movistar F1 UHD, además de contenido bajo demanda en esta resolución con series, películas y documentales 4K.
Aclarada la situación actual de los canales y contenido, podemos centrarnos en la parte técnica de este decodificador Movistar.
Lo cierto es que no estamos ante un dispositivo nada complejo y muestra de ello es que el aparato en cuestión no incorpora muchos puertos que nos puedan descolocar.
Un puerto Ethernet y una entrada HDMI serán las principales ubicaciones a tener en cuenta para conectar y poner en funcionamiento el deco.
Los más observadores podrán identificar la presencia de una ranura para tarjetas de memoria y de un puerto USB, aunque a priori estos puertos no tienen ningún cometido de cara a la conexión.
Si acaso, podremos darle uso al conector USB para poner a cargar nuestros dispositivos móviles, pero más allá de esto, no cuentan con ninguna incidencia para hacer funcionar el pack de televisión en alta resolución.
Una vez que tengamos los cables enchufados, solo nos queda presionar el botón de encendido y esperar. Nada más encenderlo aparece en nuestra televisión una pantalla azul con el logo de Movistar+ en el centro y comienza la descarga e instalación del software, que suele requerir un tiempo estimado de 12 minutos, (con fibra de 300 Mbps).
Alcanzado el final de la instalación, el deco 4K ya está listo, accediendo a un menú idéntico a los anteriores vistos en la plataforma.
Ventajas y desventajas del Deco 4K de Movistar
La principal variable al momento de valorar el decodificador Movistar parece que va a seguir siendo la posibilidad de disfrutar de canales en alta definición.
Pero claro, esta característica siempre va a estar en continuo cambio, no solo por la eterna promesa de ir incorporando nuevo contenido, sino también por la llegada progresiva de nuevos canales.
Dejemos eso a un lado y pongamos en una balanza los pros y contras de este deco 4k de Movistar.
En el lado de la balanza correspondiente a las ventajas, debemos mencionar la calidad y resolución de imagen. No cabe duda de que este es uno de los aspectos que diferencia la tecnología 4k de sus precedentes.
Al haber un mayor número de píxeles en la imagen se pueden apreciar mejor los detalles, los colores, la luz, … proporcionando una sensación cercana a lo real. Uno de los principios por los que los amantes de la televisión nos consideramos eso, amantes de la imagen en movimiento.
Otra ventaja que podemos disfrutar de la mano de la versión WiFi del decodificador es la ausencia de cables.
Esto no solo se traduce en una conexión e instalación más sencilla (con menos cables que hagan engorroso el proceso), sino que también nos evita quebraderos de cabeza y permite la instalación y disfrute de la televisión en cualquier punto de nuestro hogar.
La televisión y el router podrán vivir separados sin llevar a cabo ningún “truco de magia”.
Y hasta aquí los puntos positivos en torno al decodificador Movistar, que también cuenta con algún punto negativo a señalar. Quizás el punto negro más destacable sea el apartado de la compatibilidad.
Para disfrutar del contenido 4K de Movistar, no solo necesitaremos de un televisor compatible con dicha resolución, sino que también deberá ser compatible con la fibra óptica y el decodificador en sí. Nada mejor que realizar una consulta a la compañía para estar seguros de esta opción.
Otra desventaja señalada por muchos es que, al adquirir el deco 4K de Movistar como parte de su oferta, en realidad no estamos comprando ningún dispositivo, sino que estamos aceptando el pago de un alquiler.
Esto significa no solo que no vamos a contar con un dispositivo en propiedad, sino que si algún día decidimos dar de baja el servicio, también deberemos encargarnos de llevar de vuelta el decodificador a un distribuidor de la compañía Movistar+.
El último punto negativo a destacar de este decodificador afectará sobre todo a los clientes históricos de la firma. Y es que la contratación del servicio no incluye al tradicional técnico que viene a instalarnos el equipo a nuestro hogar.
Ahora Movistar se limita a mandarnos el dispositivo y a dejar que sea el propio usuario quien se encargue de la instalación del mismo. Es cierto que no hablamos de una tarea harto complicada, pero hay que reconocer que contamos con menor comodidad.
En cierta medida Movistar se ha caracterizado por ser un distribuidor con precio superior al resto, pero capaz al mismo tiempo de ofrecer un servicio superior.
La decisión de eliminar el envío de un técnico (si bien es cierto que podemos incluirla previo pago de una cuota) para la instalación del descodificador va a dejar desangelado a más de un usuario histórico de la plataforma.